sábado, 20 de febrero de 2016

La Fundación Dr. Iván Mañero lucha contra la Mutilación Genital Femenina

El 6 de febrero se celebra el Día Internacional de la Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina, cuyo objetivo es concienciar sobre la necesidad de erradicar la práctica popularmente conocida como ablación.

Mutilación genital femenina - Estadísticas UNICEF
Estadísticas de mutilación genital femenina entre 0–14 años (UNICEF, Noviembre 2014)

Esta lesión afecta a millones de mujeres de todo el mundo, cuyos derechos son brutalmente eliminados al extirparles el clítoris y/u otras partes de sus órganos sexuales, con graves consecuencias físicas y psicológicas.

La Fundación Dr. Iván Mañero trabaja en su Programa de Lucha contra la Mutilación Genital Femenina (MGF) reconstruyendo genitales dañados a mujeres que se han visto sometidas a este tipo de rituales. Y desde mayo de 2013 ya ha operado a ocho mujeres. Ruth Mañero, directora de la Fundación, asegura que uno de los principales frenos a los que se enfrentan es el tabú social de las afectadas.

Iván Mañero
Iván Mañero

La intervención la realiza el cirujano plástico Iván Mañero:

"La reconstrucción consiste principalmente en la resección o eliminación de todo el tejido cicatricial que cubre el clítoris y los labios menores". "Se liberan los restos de clítoris y sus nervios, que suelen estar enterrados tras el magma cicatricial. Debemos tener en cuenta que, cuando se realiza la ablación, se corta la parte visible del clítoris, es decir, una tercera parte de su tamaño total".


La operación tiene un coste calculado de entre 1.500 y 3.500 euros, que se financia entre la Fundación Dr. Iván Mañero, IM CLINIC y la Obra Social La Caixa. Y en el caso de las mujeres que llegan derivadas de los servicios sociales o que no disponen de fondos, la Fundación e IM CLINIC corren con todos los gastos.

Más info sobre la Fundación:




sábado, 13 de febrero de 2016

El machismo mata

En España han muerto más de 1.000 mujeres desde el año 2.000 a manos de sus parejas o ex-parejas. Son más muertes de las provocadas por el terrorismo de ETA en toda su historia.



El programa Salvados de la Sexta estrenó el pasado domingo 7 de febrero un episodio que se fija en el drama de la violencia machista. El programa arranca en el juzgado nº2 de Violencia de Género de Barcelona, durante una guardia de la jueza Francisca Verdejo, quien afirma que el perfil tanto de víctima como de agresor "es muy amplio, se encuentran en todas las capas sociales" y que "el 82% de las asesinadas en 2015 no habían denunciado a su agresor". Jordi Évole habla también con un hombre condenado por maltrato que acude a terapia para rehabilitarse. El maltratador cuenta cómo, en su caso, el maltrato psicológico era peor que el físico: "Yo era el hombre de la casa, era el ordeno y mando. La machacaba. Ella sufría, pero no te das cuenta". Salvados acompaña también a Marina, educadora, en una de las charlas que da en institutos para que los más jóvenes detecten este tipo de conductas peligrosas. En la estremecedora entrevista que cierra el programa, Marina cuenta a Évole como ella misma fue víctima de malos tratos a manos de su pareja de los 15 a los 19 años. Marina reflexiona sobre cómo los adolescentes reproducen viejos estereotipos machistas: "Piensan lo mismo que yo a su edad. No hemos evolucionado nada". Para ella "la gente no entiende lo profunda que es la violencia de género. Te sientes presa. Si la gente supiera lo que sufre una víctima, la sociedad no actuaría como actúa".

¿Por qué no se consigue rebajar el número de víctimas? ¿Por qué jóvenes educados en una sociedad teóricamente igualitaria reproducen estereotipos machistas? ¿Dedica la administración suficientes recursos a combatir esta lacra? ¿Se puede rehabilitar a un maltratador?

VÍDEO: Extracto del programa

Extracto en el que Jordi Évole entrevista a Marina Marroquí, una joven que sufrió violencia machista desde los 15 a los 19 años. La presidenta de la Asociación Ilicitana contra la Violencia de Género explica las amenazas que vivió cuando dejó a su agresor y la agonía de su familia cuando amenazó con matarla.


PROGRAMA COMPLETO EN:

www.atresplayer.com/television/programas/salvados/temporada-11/capitulo-11-machismo-mata_2016021100263.html



sábado, 6 de febrero de 2016

El Comité Olímpico Internacional discrimina a las mujeres

El Tribunal de Arbitraje Deportivo reconoce que no hay un método válido para determinar el sexo de los atletas y que los usados hasta ahora son inútiles y van contra las mujeres.

El deporte nunca ha sabido cómo enfrentarse a las particularidades de la intersexualidad (antiguamente hermafroditismo). La división tradicional "Hombre" / "Mujer" ya no es tan fácil como gustaría a muchos. Es cuestión de hormonas.

Certificado de Feminidad
Tarjeta de verificación de feminidad de los años ochenta
Muchas deportistas de élite son descalificadas para competir con las mujeres porque sus niveles naturales de testosterona son los de un hombre, condición conocida como hiperandrogenismo.

Según el COI (Comité Olímpico Internacional), las deportistas con niveles de testosterona en el rango normal para un varón –entre 10 y 35 nanomoles por litro de sangre- tienen una ventaja injusta sobre las demás mujeres.

En 1968 el COI estableció las humillantes pruebas de verificación de sexo, primero mediante una evaluación visual de las mujeres desnudas, y luego mediante el raspado bucal, conocido como el test cromosomático. Con él, buscaban mujeres XY en su último par de cromosomas, y hombres XX.

Dutee Chand
Dutee Chand

En 1985, la vallista española María José Martínez Patiño se olvidó de su tarjeta de verificación de feminidad en casa y tuvo que volver a pasar la prueba en la Universiada de Kobe (Japón, 1985). Los médicos le informaron que las células obtenidas en su boca tenían cromosomas XY, y su federación la envió de regreso a España. Según el COI, era un hombre.

Con todo, sólo una vez se ha descubierto a un hombre haciéndose pasar por mujer: al saltador de altura alemán Heinrich Ratjenen, en Berlín 1936, donde participó como Dora, pero era porque había sido criado como tal desde niño.

El endocrinólogo Peter Sonksen, investigador asociado del COI para crear pruebas antidopaje por hormonas de crecimiento, declaró que “es una regla idiota. La regla es injusta, grosera y poco científica”. Según Sonksen, los niveles hormonales de los atletas de élite difieren de los de la población en general. No hay un límite distintivo entre el rango femenino y el masculino de testosterona, sino que se superponen. Por tanto, se trata de un factor entre muchos, y la línea trazada por el COI era arbitraria.

Pero por fin en julio de 2015, la atleta Dutee Chand, campeona asiática júnior de 200 metros, logró que la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) retirase la Norma de Hiperandrogenismo como criterio para determinar el género y decidir quiénes pueden competir en categoría femenina.